Los camioneros son solo el principio

El inicio de una década de retórica política anti-automatización

mixx.io es una publicación diaria sobre tecnología editada por Álex Barredo. Suscríbete para recibirla en un email todas las mañanas.

En Hollywood Reporter entrevistaron a Steve Bannon, que entre otras muchas cualidades, será el hada en el hombro de Donald Trump. Dice:

Eso es lo que [el Partido Demócrata] no supo ver. Estaban hablando a esta gente con compañías valoradas en 9.000 millones de dólares con solo nueve empleados. Eso no es la realidad. Han dejado de ver lo que el mundo es en realidad.

Esto es una opinión de alguien que no entiende cómo la tecnología puede escalar, y que utilizará su posición para hacer todo lo que pueda para poner palos en las ruedas. Más abajo, nos encontramos con la cara B que completa su discurso:

Con las tasas de interés negativas en todo el mundo, es una gran oportunidad para reconstruir todo. Astilleros, fundiciones, sacar todo eso adelante.

Astilleros y fundiciones sí. Facebooks y Googles no. Es el principio de una retórica anti-automatización, anti-inteligencias artificiales que se extenderá por el mundo y acaparará los titulares durante los próximos años. Es el tercer acto de una obra conservadora en el sentido más amplio: anti-inmigración, anti-globalización y, ahora, anti-automatización.

Es algo calculado, una estrategia — válida — para conseguir votos. Es fácil saber por qué, un ejemplo:

• Facebook, una de las compañías más innovadoras del mundo, tiene solo 15.000 empleados, y una valoración de 350.000 millones de dólares.
• Ford tiene 200.000 empleados, una valoración de 46.000 millones de dólares.

Ambas compañías anotaron en sus libros unos beneficios similares en 2015. ¿Cuál será la que utilice su software, servicios, automatización e inteligencia artificial para duplicar o triplicar ingresos en los próximos años? ¿Cuál la que se expandirá de formas aún no imaginadas durante la década?

@tculpan @charlesarthur 10 coders = 10 votes, 1000 workers = 1000 votes

 — @somospostpc

Ahora pensemos en los empleados como ciudadanos que votan, y decidid a cual de los dos grupos os gustaría tener más contentos de cara a unas elecciones.

La automatización de todo lo repetitivo eliminará unos trabajos y creará otros, pero tardará tiempo. Los trabajos que se van a eliminar son tangibles, los podemos ver desaparecer delante de nuestros ojos. Cuando la mayoría de camiones se conduzcan solos — o en el mejor de los casos, con un conductor humano de apoyo en remoto capaz de llevar flotas de 20 o 30 a la vez — , ¿qué político sabrá explicar a las familias de los 3,5 millones de camioneros que trabajan en Estados Unidos, que con las políticas correctas de educación y empleo, podrían conseguir un trabajo con proyección de futuro en una década o dos? Es más fácil conseguir votos de los camioneros — y sus familias — que perderán sus trabajos sin una alternativa real.

Los camioneros son solo la punta del iceberg. Un ingeniero de Amazon puede acabar con el empleo de cientos de personas en supermercados y grandes almacenes del mundo al mejorar la eficiencia de un botón en la web. Una ingeniera de Google puede crear un sistema de traducción simultánea con voz natural que acabe con el trabajo de miles de traductores y guías turísticos en todo el mundo. Un ingeniero de DJI puede crear un sistema de propulsión para drones que acabe con el empleo de miles de repartidores en todo el mundo.

Entre estos pocos ingenieros y los empleos perdidos por tantos solo se encuentran las regulaciones creadas por legisladores que deben velar por el bien común y el avance de la sociedad. ¿A quién van a dar prioridad?

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